Un acoplamiento hidráulico es un dispositivo mecánico que utiliza un fluido hidráulico para transmitir la potencia mecánica entre dos ejes o componentes. Consiste en una carcasa exterior, un impulsor (conocido como «rodete») y un rotor. El fluido hidráulico contenido dentro del acoplamiento permite la transferencia del torque desde el impulsor al rotor, transmitiendo así la potencia entre los ejes.
El acoplamiento hidráulico se basa en el principio de la hidrodinámica, donde el fluido hidráulico en movimiento crea una fuerza que impulsa el rotor y transfiere la potencia mecánica. Al mismo tiempo, el fluido hidráulico permite cierto grado de deslizamiento entre el impulsor y el rotor, lo que proporciona una protección contra sobrecargas y permite un arranque suave y gradual.